Nuevo disco de Esther Fonseca en el que muestra su evolución interpretativa y su gran sensibilidad para adaptarse a unos textos y músicas compuestas a medida por su padre, Nacho Fonseca, y en el que colaboraron como arreglistas, además del propio autor, los jóvenes músicos asturianos Héctor Braga (Llangres) y Marco Rodríguez. Los intérpretes, además de los tres citados, también son jóvenes de las nuevas generaciones del folk asturiano como Borja Baragaño (whistles, flauta travesera, gaita asturiana, gaitar irlandesa), Aitor Miyares (acordeón), Yago Prado (arpa céltica y guitarra acústica), Alberto Lozano (teclados), con los que trabajaron así mismo otros músicos de larga trayectoria como Elías García (bouzouki), Fernando Arias (percusiones étnicas), Manolo Durán (percusiones tradicionales), Vicente Baragaño (bombo) y un grupo de la Banda de Gaites Mieres del Camín. Nacho Fonseca toca la guitarra acústica y el teclado en varios temas, al igual que Marco Rodríguez (guitarra española y teclado) y Hécotr Braga, arreglista de seis de los temas, demuestra s valor como instrumentista tocando la bandurria (rabel asturiano).